...que poco hemos cambiado...

Esta mañana estuvimos en la Jornada de puertas abiertas del hospital de Baza que ha organizado el GALM Luna de Leche, con la colaboración, obviamente, del hospital de Baza. Llegue a casa a las dos del medio día realmente agotada y no porque el hospital fuera inmenso y nos hayamos dado la gran caminata para recorrer los espacios donde se pare, no. El hospital de Baza es pequeñito y eso, eso tiene sus ventajas. En fin, que mi cansancio viene dado por la tensión acumulada durante la visita a dicho lugar y la conversación informal y distendida que hemos tenido con parte del personal responsable de la zona de partos …mamma mía…. “pero nosotros queremos un parto natural y así lo hacemos” nos han repetido una y mil veces.

Quizás debería dejar pasar los días y escribir esta entrada más adelante cuando se me haya pasado un poquito este calor que me arde dentro y poder agradecer al hospital que nos hayan abierto las puertas y hayan sido tan cordiales y amables enseñándonos como son “sus partos naturales”. Quizás debiera ser políticamente correcta, pero no puedo, hay algo dentro de mi que no me deja, ese sentimiento de parto robado, de poder robado, de, incluso, hijo robado.

“… realmente es mejor no bañar al niño durante el primer día porque la capa de vermix es buenísima para él, sin embargo aquí lo bañamos antes de las 24 horas porque es mejor que te enseñemos a hacerlo porque luego te lo llevas a tu casa y a ver como lo haces…” ¿De verdad que nos ven tan bobas? Es cierto que los primeros baños de los bebés, o más bien, los primeros TODO con él son impresionantes pero es parte del proceso, de la vivencia, de la experiencia de la madre. ¿Cómo es señor que no me entero, que gracias a que tu me enseñes a bañarlo, que seguramente eso implica que lo bañarás tu, gracias a eso, yo ya voy a manejarme sin miedo con mi bebé en casa? Era una sensación de toma te damos este niñito que nosotros manejamos a la perfección y que pobre, se va contigo, que no sabes. Risitas cuando nos explicaban como cojen las madres a los bebes las primeras veces, apabulladas, llenas de miedo y ellos (digo ellos porque precisamente han sido dos hombres), ellos si que saben y harán de padre contigo y, al igual que te enseñaron a sacar a el bebé o lo sacaron directamente, te enseñarán a bañarlo y te salvarán.

Joder… perdonadme, quizás realmente hoy no sea el momento, sé que hay que ser agradecida, sé que hay que ser políticamente correcta… creo que estos escritos no me abrirán las puertas en el hospital como doula… Cuanto me queda por respirar uffff.
Allí he sido muy correcta, salvo alguna pregunta comprometida con cara de inocencia y de no tener ni idea, por ello la tensión acumulada, claro, pero sirva esta carta para desahogo, lo necesitooooo.

Ahhh chicas pero estamos salvadas, cuando acaben la obra en la planta de maternidad que esperan sea para final de junio tendremos televisiones digitales en las habitaciones y conexión a internet, lo último de lo último… y lo más necesario para parir y para el posparto.

Siiii ya se que estoy siendo muy mala, por que también nos han contado que ahora las habitaciones serán individuales con baños en cada habitación y que no se llevarán al bebé a la zona de pediatría para las revisiones sino que el pediatra irá a la habitación 0LEÉÉÉÉ!!! Si, todo no ha sido malo, no sé por que estoy así. Si la intención se ve buena mientras ellos no pierdan el control de lo que está pasando. ¿Cómo se puede controlar un volcán en erupción? Parece misión imposible ¿no? Pues ellos lo han conseguido, ellos lo han conseguido con nosotras, ellos han conseguido controlar la vida misma a través del miedo. Y hoy lo he vuelto a sentir, he vuelto a sentir miedo y ridiculización. Miedo cuando a cada pregunta de una mujer que mostraba fuerza la respuesta era “eso es peligroso, tu bebé puede morir. Aquí no hacemos nada gratuito, nuestra tendencia es de parto natural”. Ridiculización cuando, tras haber presentado un plan de parto, cambias de opinión respecto a algo (sin entrar ahora en porque las mujeres cambiamos de opinión) y te sueltan “es que a la menor ya estáis cambiando de opinión, pero ¿tu no querías un parto natural?

Qué poquito han cambiado las cosas, todo sigue siendo una lotería, como ya sabíamos “depende de quien te toque” porque el protocolo a seguir es el mismito que hace 11 años. Tras esa intención que nos han vendido hoy, se ocultaba lo que de verdad piensan, lo que de verdad defienden, el lenguaje les delataba, un triste protocolo obsoleto y muy poco flexible.

Estoy muy muy triste, siete mamás embarazadas hacían la visita con nosotras, siete mamás que han visto donde, como y con quien van a parir sin otro remedio… a algunas nos han entrado ganas de salir corriendo… otras han salido de allí con la lengua partida, como dicen por aquí, por mordérsela para no hablar más de la cuenta. "Se trata de hacer un parto natural”, nos han dicho una y otra vez… pero tienes que estar monitorizada, si todo va bien quizás no sea todo el tiempo porque no escuchar el latido del bebé es peligrosísimo. Total eso no interfiere con nada, no es invasivo, a ti que más te da… en cambio el beneficio de ello es inigualable. Costo-beneficio, dicen. Tienes que tener la vía pillada,… pero nos dejan deambular con todas estas cosas colgadas y parir en la postura que queramos. Si ven que la dilatación se estanca o va lentilla nos ayudarán rompiendo la bolsa. Ahhh y ya he dicho que no separan al bebé de su madre, solo un momentillo para pesarle, aspirarle, ponerle una pomadita de nada en los ojos, pincharle la vitamina k y la vacuna de la hepatitis B y enseguida otra vez contigo, si es que no quieres descansar. No sé si me olvido de algo.

Puedo ver desde donde lo hacen pero eso no me quita la rabia. Al final todos somos inocentes, los que nos roban ni siquiera saben lo que roban y a las que nos roban, la mayoría ni nos enteramos de lo que nos ha sido robado. ¿He dicho inocencia o quizás es ignorancia?

Perdonad este desahogo que por fin a ayudado a aflojar mi estomago en la Semana Mundial por un Parto Respetado.